Por: Jorge Patiño - comunicador social.
Lo ocurrido en Palestina
durante el pasado fin de semana, en el marco de las Fiestas del Recuerdo, dejó
una sensación que hace años el municipio no vivía: la de un pueblo lleno,
alegre, vivo y orgulloso de sí mismo. Más allá de los conciertos, de los
artistas invitados y de la logística impecable, lo que realmente quedó en el
ambiente fue ese espíritu colectivo que pocas veces se ve en este municipio de
15 mil habitantes.
Propios y visitantes fueron
testigos de un precedente comercial y social que vale la pena destacar. El
comercio se dinamizó como no ocurría desde hace mucho tiempo y el turismo
encontró un nuevo punto de referencia en la región. Más de seis mil personas llegaron
al parque principal para disfrutar de figuras como Golpe a Golpe, Hernán Darío,
Hernán Gómez y Ósmar Pérez, entre otros artistas que hicieron vibrar a la gente
y que, sin duda, aportaron a que el municipio se mostrara con su mejor cara.
Fue un fin de semana donde Palestina sonrió, donde la colina iluminada volvió a
encenderse.
El balance presentado por
las autoridades es positivo en todos los frentes. Incluso los desmanes propios
de una multitud de ese tamaño fueron controlados con rapidez gracias a la
acción oportuna de la Policía. Nada logró empañar el sentimiento generalizado:
Palestina vivió unas fiestas sin envidiarle nada a eventos mayores, incluidas
ferias de ciudades más grandes como Manizales.
Quizá faltó programación
cultural y deportiva, sí. Pero el regreso masivo de la gente a las calles, las
familias reunidas, los jóvenes llenando el parque, los comerciantes satisfechos
y la música retumbando en cada esquina demostraron que el pueblo tiene un
potencial enorme, que solo necesita voluntad y visión para seguir creciendo.
Estas fiestas no fueron un simple evento: fueron un recordatorio de que
Palestina puede brillar, puede convocar, puede atraer.
Ojalá este nuevo aire no se
quede en un fin de semana. Ojalá sirva para que la administración, los
empresarios, los líderes sociales y la comunidad entiendan que el municipio
tiene todo para consolidarse como un destino cultural y turístico del departamento.
Palestina demostró que cuando hay organización, respeto y una buena
programación, el resultado es un ambiente que pocas veces se ve: uno que nos
hace sentir orgullosos de ser de aquí, o por lo menos, orgullosos de haber
venido.
Felicitaciones a todos.