![]() |
Foto: @edwinhmaldonado - El Tiempo |
En el marco del Congreso de la Andi 2025, la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal presentó un plan de gobierno centrado en la reducción del tamaño del Estado, el fortalecimiento de la seguridad, el apoyo al sector productivo y la defensa de principios y valores como bases para un país “próspero y unido”.
Durante el debate, Cabal destacó el papel de los empresarios como motor de la economía y cuestionó la carga tributaria que, según dijo, supera el 60%, así como la expansión burocrática y el mal uso de los recursos públicos. “Sin seguridad no hay desarrollo y sin desarrollo no hay paz”, afirmó, evocando los avances en materia de seguridad durante el gobierno del expresidente Álvaro Uribe y advirtiendo sobre el deterioro actual bajo el mandato de Gustavo Petro, al que atribuyó la existencia de 300.000 hectáreas de coca y un debilitamiento de la autoridad estatal.
La aspirante presidencial anunció su compromiso de trabajar junto al sector productivo para eliminar trabas normativas, reducir impuestos, ampliar el acceso al crédito y recuperar un sistema de salud que, a su juicio, ha sido “arruinado por la ideología y la cobardía de no enfrentar a la izquierda mentirosa y ladrona”.
En política exterior, Cabal fue enfática en su rechazo a cualquier acercamiento con el gobierno venezolano. “Yo rechazo toda relación que el Estado colombiano pueda establecer con el jefe del cartel de los soles, Nicolás Maduro”, afirmó, y prometió impulsar acciones para ayudar a restaurar la democracia en Venezuela. Propuso además un control fronterizo basado en drones y satélites para combatir la ilegalidad, garantizando al mismo tiempo el intercambio natural de las comunidades binacionales.
En materia de seguridad, anunció que su primera misión como presidenta sería recuperar los corredores estratégicos de la criminalidad con fuerza pública, tecnología y reactivación de batallones de alta montaña, complementados con erradicación y fumigación de cultivos ilícitos. Subrayó la necesidad de una política de seguridad de Estado independiente de los intereses de un gobierno particular, asegurando que “el criminal que quiera hablar, que lo haga con el juez”.
Finalmente, Cabal invocó la propuesta del fallecido líder conservador Álvaro Gómez Hurtado para alcanzar consensos nacionales: “Le propongo a Colombia, como diría Álvaro Gómez, un acuerdo sobre lo fundamental. Menos discurso y más acción por el país”.