En un diálogo abierto y propositivo, los candidatos al Consejo
Municipal de Juventud (CMJ) de Chinchiná participaron en un live de La
Hora del Café, donde expusieron sus ideas, preocupaciones y compromisos con
los jóvenes del municipio.
Valeria Díaz, candidata por la Fundación Vida,
Esperanza y Paz, afirmó que su principal motivación es “ser la voz de los
jóvenes que no pueden alzarla” y destacó la necesidad de “crear más
oportunidades laborales y educativas para la juventud chinchinense”.
Érika Rios, candidata del movimiento Gente en Movimiento, destacó su compromiso con promover una participación juvenil más activa en los espacios de decisión del municipio. Enfatizó que la política debe asumirse como un escenario de respeto, diálogo y construcción colectiva, donde los jóvenes sean reconocidos no solo como el futuro, sino como una parte esencial del presente que necesita ser escuchada e incluida en las decisiones públicas.
Durante el espacio, los aspirantes también debatieron sobre
los retos de la política local. Coincidieron en que la polarización y la
falta de representatividad son factores que debilitan la confianza de los
jóvenes en los procesos públicos. “La política debería unirnos, no dividirnos”,
expresó Érika, una de las participantes, al resaltar la necesidad de superar
los prejuicios partidistas.





